El Circo de los Horrores nos traslada en esta ocasión a un antiguo manicomio del siglo XVIII donde la locura no tiene límites. Un espacio siniestro y de alto riesgo en el que conviven, excéntricos y resignados mortales, con peligrosos asesinos que esperan el fatal desenlace en la silla eléctrica.
Todos conforman una curiosa familia de enajenados. Una vez más, el Circo de los Horrores fusiona el teatro de vanguardia, el circo contemporáneo y el cabaret más salvaje, sus inconfundibles sellos de identidad, en el que prima el terror psicológico y el humor ácido y grotesco.